domingo, 29 de abril de 2012

martes, 17 de abril de 2012

CRÓNICA DE FONT AMARGA - LES SALINES


Crónica de Míriam.

                Ya llevaba tiempo rondándome en la cabeza la idea de realizar una carrerita de montaña. Con bastante miedo, ya que siempre entreno en asfalto y además en llano, decido apuntarme a la mitjamarató de muntanya Compac-Carrícola, el 1 de abril de 2012 sería el gran día (nooooo, no me he equivocado de crónica, ahora os explico el porqué) . A partir de este momento intento organizarme bien los entrenamientos, por primera vez en mi vida, jejje ya que siempre entreno por sensaciones. Las semanas anteriores me apunto a carreras con desnivel (pujada al terrero de Chella, pujada al Castell de Cocentaina, pujada a la Font Roja), para que me sirvan de entrenamiento, y la semana antes del reto, el 25 de marzo de 2012 me lo reservo para “descansar” y llegar con fuerzas a la prueba, como me aconseja David, ya que yo quería hacer la media maratón de Moncada, y él como buen hermano mayor, “no me deja”jjejej, y  yo como buena hermana pequeña y reciente corredora disciplinada le obedezco.
                Todo iba sobre ruedas, iba cumpliendo con los entrenos, hasta que el día 20 se torció el plan. David me avisa de que el día 25 de marzo (mi fin de semana de descanso) hacen una carrera de montaña, no demasiado dura, con poco desnivel acumulado (498), muy corredora, a la que Silvia se ha apuntado, y a la que me podría apuntar yo también, él esa semana descansaría ya que acababa de venir del Atacama Crossing, quedando segundo individual, y primero por equipos (si es que, ES EL MEJOR:). Le digo que me lo pensaré, me meto en la página, para ver el perfil, etc. Y veo que las inscripciones cierran en 20 minutos!!! Dejándome  llevar por la presión y por la ilusión del momento, me apunto! Por si acaso después me arrepiento… y claro que después me arrepentí… pero de haberme apuntado!!, para una vez que consigo organizarme!!!… y ahora es cuando digo esa frase mítica que todo corredor popular, repite una y otra vez, sobretodo cuando le suena el despertador a las 6 de la mañana un domingo:  “QUIÉN ME MANDARÍA A MI”
Bueno, pues el gran día se adelantaría una semana!! Y espero que me guste la experiencia, por que la semana siguiente me espera otra jejejje
Después de este prólogo, ahora sí: CRÓNICA DE MI PRIMERA MEDIA MARATÓN DE MONTAÑA FONT AMARGA- LES SALINES.
Bueno pues lo dicho, habiéndome saltado la programación, además su parte más importante, el DESCANSO, y los consejos de mi fisioterapeuta, el cual me dijo que debería descansar, ya que tengo los aductores muy, muy  sobrecargados, me presento en Villanueva de Castellón, a escondidas, y sin decirle nada a nadie (Cómo si fuera a cometer un asesinato jajjajja) donde había quedado con Silvia y David. Silvia con pocas ganas, y yo con menos, recogemos los dorsales y las camisetas, esta vez para mí camisón jeejej. David, cómo buen hermano mío que es, pues se salta también su programación y su descanso y se apunta también!Jajjajajaj vaya par! Nos cambiamos de ropa, una carrerita hasta la línea de salida que nos sirve de calentamiento, y PUUUUUM! Pistoletazo de salida.
Silvia sale disparada, y se esfuma entre la muchedumbre, David y yo salimos juntos (increíble pero cierto), yo creo que es uno de esos sucesos que ocurren una vez cada 1000 años.

Una vueltecita y salimos del pueblo. Nos adentramos en un camino empedrado, cubierto de rosales silvestres y lleno de barro, bastante técnico  (o eso decían los corredores experimentados, ya que para mi, es todo nuevo) Aquí es donde se David se adelanta, y empieza la aventura. A partir de ahora, ya que es mi primera carrera de montaña, intento disfrutar, analizar la situación, y observar a los demás corredores para aprender de ellos. Una de las primeras cosas de las que me doy cuenta, es que es muy difícil dosificarse las fuerzas, ya que nunca sabes lo que te espera, así que a ritmo suave y sin pasarseJ
Los 3 primeros kilómetros  trascurren en susodicho camino con piedra suelta. Debido a que es muy estrecho, se producen varios tapones en los que me da tiempo a descansar y recuperarme, y eso que acabamos de empezar. Este primer tramo pasa muy rápido, no como en asfalto, que los primeros kilómetros son interminables.
En los siguientes kilómetros ya empezaríamos a sufrir el desnivel en las piernas, ya que las subidas y bajadas no pararían de sucederse, sin dejar  a penas tiempo para coger aliento, o cómo hubierais dicho los corredores de montaña “era una carrera ROMPEPIERNAS” jejje(tengo que empezar a hablar con propiedad) Pues lo dicho, ahora subimos por una sendita, ahora bajamos, ahora volvemos a subir por un cortafuegos, y ahora volvemos a bajar, y ahora tenemos sol, y ahora sombra, y volvemos a subir y nos cruzamos con una banda de músicos infantil que nos ameniza la carrera. Me pongo a pensar lo mal que lo habrá pasado el niño de la tuba para subirla hasta allí arriba, jejjeje deberían haberle dado trofeo a él también.
Volvemos a bajar y ahora meto el pie derecho en un charco y la zapatilla me pesa un kilo y medio, me meto por un matorral, para quitarme el barro, le doy unas pataditas a una piedra y listo!!!! Ya no tengo barro,… y ahora una pista, y ahora una sendita y ahora me resbalo y choooooffff ahora he metido el pie izquierdo en otro barrizal y vuelta a empezar!!!, me restriego por unas hierbas, ahora con una piedra, y ahora VOLVEMOS A SUBIR!!

Y después pues… volvíamos a bajar, y ahora parece que por fin viene el llano, pero no volvíamos a subir… y así pasaban los kilómetros, unos más rápidos, otros más lentos, unos andando y otros corriendo, y así una y otra vez, hasta llegar al kilómetro 18 aproximadamente que era donde retomábamos el camino por donde habíamos empezado, lugar donde me doy cuenta de que he cogido el mp4, pero no he llegado a ponerme los auriculares, un hecho insólito, ya que siempre corro con música, pero hoy lo he pasado tan bien que no me he acordado ni de ella. Me divertí muchísimo, sobretodo porque no apreté en ningún momento y sólo me dediqué a disfrutar de las sensaciones que fueron en todo momento buenísimas, bueno… para que voy a mentir, en las subidas, un poquito mal si que lo pasé… pero ya no me acuerdo, sólo perduran los buenos momentos.
Una vez llegado a este momento, aunque las sensaciones hayan sido buenas, el cansancio se empieza a notar, sobre todo en los aductores (voy pensando en la trola que le voy a decir a mi fisio cuando llegue el lunes a su consulta, después de mi fin de semana de “descanso”: … pues mira, estaba yo tranquilamente sentada en un bar, haciéndome una cerveza después de haber descansado tooooodo el fin de semana, y de repente, zas!!!!, me empezó a dar unas punzadas terribles… jajajajjaja ¿colará? Jajajjaja
Vuelvo a pasar por el tramo de piedra suelta, el cual está ya, a estas alturas muy embarrado, ya que ya han pasado muchísimos corredores. No dejo de trotar, ya he pasado antes por aquí y se que no me espera ninguna sorpresa, este es el momento que más largo se hace, y en el que más que esfuerzo físico, te exige esfuerzo mental, para acabar la prueba. Este es el momento en el que te tienes que repetir una y otra vez, que eres capaz y que tus piernas van a ser capaces de culminar los 21 kilómetros de esfuerzo, sufrimiento. Pero bueno por muchas veces que te lo repitas, a estas alturas y con este calor, ya te pesa hasta el dorsal!!
Por fin se divisa el pueblo, unas zancadas más, y habré llegado el final. Aquí empieza a haber gente animando, con lo cual, toca plantar tipo, sonreir, y hacer que estas fresca como una rosa jajja cuando por dentro estás como una mie……… jajajjaja  Entre aplausos cruzo el arco de meta, con 2h30’ super contenta de haber terminadoJ
Recojo el avituallamiento final, naranjas, aquarius, bocata de blanco y negro, por cierto un 10 para la organización!!!  Y me reúno con Silvia y David, que ya han almorzado y ya han hecho los estiramientos pertinentes. Me cuentan que Silvia ha quedado primera absoluta (no me quedaba ninguna duda, después de haberla visto salir como una bala!!) y David se ha dedicado a acompañarla, pues aún se siente resentido después del Atacama crossing.
Cómo conclusión puedo deciros , que me encantó la experiencia, que repetí la semana siguiente en Carrícola (que no morí en el intento) y que espero repetir muchas veces más, porque momentos así son los que te hacen sentirte bien J

sábado, 7 de abril de 2012

II MITJA MARATÓ DE MUNTANYA DE CARRICOLA (01/04/2012)

Crónica de Jorge
Tenía muchas ganas de que llegara esta carrera, el año pasado participé en la primera edición, fue mi primera carrera de montaña y me encantó.

Bueno, en principio íbamos a ir todos juntos, pero la expedición creció a última hora y cogimos dos coches. Óscar pasó a recoger a Enrique y después a mí. Sobre las nueve de la mañana llegamos a Carrícola, pero a pesar de llegar bien de tiempo nos toca aparcar algo lejos. Salimos del coche y dejamos algunas cosas en el maletero. Parece que va a hacer calor y Enrique tenía pensado salir en manga larga y camiseta debajo, menos mal que al final nos hizo caso y se quitó la de manga larga.

Después empiezan con la operación “embadurnarse”, que si cremita en la cara para el sol, que si cremita en las piernas con efecto calor, que si vaselina en las zonas “delicadas”,…… “joder, tardáis más que las tías en arreglaros” les digo, vaaaale yo también me puse crema, pero sólo la de las piernas y francamente no noté ni calor ni nada.

Estando en estos preparativos llega el segundo coche de la expedición “Aper y amigos” con Silvia, Jessi, Miriam, Iván y otro amigo que no corrió. Por fin dejamos el coche y subimos a la plaza a por el dorsal y el chip. Primera novedad, el chip va pegado al dorsal, es la primera vez que lo he visto y es muy práctico. Dejamos la bolsa en el servicio de guardarropa, aunque después volvemos un par de veces a dejar o coger cosas y la chica ya se lo toma a guasa.


Para seguir la tradición me hago un café que ofrece la organización, acompañado de un trozo de coca dulce. Vemos a David que ha acudido directamente en otro coche. Alguna foto, visita al WC para soltar lastre y se acerca la hora, así que nos vamos a la zona de salida. Es curioso cómo, sin que nadie diga nada, cada uno sabe cuál es su sitio en el pelotón.

Por la megafonía se pone música para animar la salida y se pide un aplauso a todos, es un momento emocionante, la música y todos los corredores brazos en alto aplaudiendo…. Se oye Carros de Fuego y dan la salida con unos petardos y papelitos por todas partes, una salida muy bonita.


El único que sigue conmigo es Enrique, vamos bajando, pasando por una zona con mesas y volvemos a subir al pueblo tras dos kilómetros. Salimos del pueblo y cogemos pista hacia arriba, la abandonamos para coger senda, este trozo es nuevo este año, subimos hasta el km. 4, aquí alcanzo a Miriam y empezamos a bajar hasta el 5, esto también es nuevo, así que pienso que ya el resto es igual que el año pasado, porque dijeron que habían cambiado dos trozos.



Por este castillo pasamos 2 veces, al subir y al bajar
En los primeros avituallamientos casi ni paro, son líquidos y ya llevo mi bidón, luego en los sólidos cojo alguna cosa, sobre todo fruta porque el chocolate está que se derrite, hace muchísimo calor.


Empezamos otra vez a subir por pista, mucha pista y el trozo final por senda, pero poco “técnica”, así hasta llegar a la parte más alta de la carrera, sobre el km. 12 y empezamos a bajar, también por senda poco “técnica”. Cerca del final de la bajada veo a Óscar unos 100 mts. delante, no me lo esperaba, intento acercarme más pero llegamos a otra zona de pista en falso llano que empieza a costarme y se me va poco a poco, para llegar a otra bajada hasta el km. 19 y ahí empezar la última subida, ooootra vez por pista, pufff, por fin en el km. 20 dejamos la pista para bajar por senda hasta el pueblo, donde entras en meta mientras por megafonía te anuncian y te felicitan.

Recojo los regalos (menuda bolsa que nos han dado), veo a Óscar, recojo la bolsa del guardarropa y me voy a las duchas, mientras Óscar va al coche a coger sus cosas y las de Enrique.
Este año sí que he encontrado las duchas, el año pasado iba tan cansado que cuando me di cuenta, me había salido del pueblo, así que cogí el coche y me marché. Total, que voy siguiendo los cartelitos y cuando llego a los vestuarios me dicen que las dos puertas son para chicas que los chicos tienen que ir enfrente, en la zona de la piscina. Entro en el recinto y veo unas telas formando un cuadrado y dentro unas cuantas sillas de plástico y unas duchas altas…….. muy altas y pienso “pues como no me abra alguien el agua, este año tampoco hay ducha”, pero en Carrícola piensan en todo y han puesto unas cajas de plástico para que te subas en ellas y abras la ducha.

Cuando ya estoy secándome aparecen Óscar y Enrique, ¿pero dónde os habéis metido?, resulta que Óscar había intentado subir el coche pero es una carretera estrecha y le tocó dar la vuelta otra vez y aparcar más lejos de lo que estaba antes.

Bueno, se duchan y subimos a la plaza, donde están los demás miembros de nuestra expedición. Silvia y Jessi no se han podido duchar porque les han dicho que se esperen a la entrega de trofeos…….. ¿No os lo había dicho? Pues sí, las dos cogieron trofeo, ¿qué raro verdad? Jejeje…. David tampoco falló y quedó segundo.

Vemos la entrega y nos despedimos. Al llegar al coche nos queremos hacer una foto y Óscar le pide a una chica si nos la puede hacer, pero va cargada con un trofeo y no sabe dónde dejarlo, así que nosotros amablemente le decimos que nosotros se lo sujetamos y aprovechamos para hacernos la foto con él, jejeje.


Por último, me gustaría felicitar a la gente de Carrícola, porque han logrado lo que parecía imposible, superar la edición del año pasado, siempre atentos y amables, con música por el recorrido, gente animándote por tu nombre, dándote la enhorabuena al terminar e interesándose por tu estado y demostrando que se puede hacer mucho con muy poco. Gracias.