SURESTE TRAIL MARATHON 29_11_2009

Crónica de Jessi

Después de no haber ido a Jumilla, en un impulso y con “mono de carreras”, me apunté a la Sureste Trail Marathon. Tras pagar, me empecé a asustar; no por el hecho de los 42 km, sino porque sólo daban 8h. para terminar… Mi ritmo en montaña cuando hay bastantes subidas (y ésta es de esas) está en torno a 5 km/h, así que lo iba a tener justillo. En fin, que tras consultar mis posibilidades con Rubén, Miguel Flor… estaba un poco más animada (¡¡pero seguía asustada!!).

Suena el despertador a las 4:45, y me termino de preparar la riñonera, bolsa… A las 5:10 ya estaban Ana y Rubén esperándome. ¡Ya voy! Los pobres, siempre les toca esperar, pero es que son muy puntuales!! Un poco antes de 8 llegamos al polideportivo de Galifa, donde darán la salida. Recogemos dorsales y saludamos a algunos de los (pocos) valientes que se habían animado a esta carrera: Miguel Flor, Vicente Roig, Josera del foro… y pocos más conocidos, la verdad. Bueno, estaban los maquinotes que iban a por la carrera. Chicas… sólo 5!! (Ana al final no corrió, no estaba totalmente recuperada del esguince de tobillo), y entre ellas Mónica Aguilera. Maaaaa que tutto!!!

Dan la salida, y en la primera subidita de tierra ya me quedo de las últimas. ¡Pero yo no me preocupo! Sé a qué ritmo puedo ir, y tengo que ir para estar 8 horas caminando-corriendo por ahí… Una subida con bastante pendiente (donde alcanzo a algún corredor), y en 50’ llego a la Muela. De ahí, todo p’abajo… ¡qué chulo! Me acuerdo de Silvia, por aquí disfrutaría seguro. Después de un avituallamiento de agua, una corta subida por pista (donde aprovecho para comer frutos secos), y luego otra vez bajada, con bastantes piedras y zigzagueando. Las piedras son un poco inestables y pam, me doblo el tobillo; un poco más adelante otra vez… Sigo y me lo vuelvo a doblar (esta vez para el lado contrario, así compensamos… jejeje). Pienso en Ana, y menos mal que no ha venido porque con el pie así, este trozo lo iba a pasar bastante mal. En esta bajada adelanto a otros 4 ó 5, con los que posteriormente durante todo el camino nos vamos adelantando mutuamente.

Llego a la playita, donde hay otro control con agua (sólo agua!!!), y como empiezo a tener calor pienso: si a la vuelta llego aquí antes de 6 horas, me pego un bañito seguro!! Una subida por roca y sendita da acceso a una pista, donde seguimos subiendo. Luego otra bajada y otro avituallamiento. Una sendita sube-baja, un trozo de pista y llegamos a un antiguo cauce, donde hay bastantes piedras grandes. Aquí me empieza a molestar la riñonera, y me coge bastante flato… Hace mucho que no pruebo la riñonera, ¡¡mal hecho!! No puedo correr, y tengo que llevar todo ese trozo la riñonera desabrochada, ale, pues a respirar hondo y a intentar que se pase!! Llegamos al final de este tramo donde hay un animador con bocina y todo… Vamos!!! Empiezo una subida y me veo a alguien bajando, coño! Si es Aurelio Olivar que ya está de vuelta! Yo voy por el km 15, y él ya vuelve… Esto puede servir para animar o para desanimar… pero afortunadamente, me lo tomo con humor… Total, sabía que esto iba a pasar!! Seguimos subiendo, luego bajamos un poco, llegamos a un trozo que hay que saltar de piedra en piedra… mientras me sigo cruzando con gente que volvía ya. Llegamos a la “recta” final, donde sigo sin poder correr… una pista que haciendo zig-zags empieza a subir, y subir… me cruzo con Vicente Roig, Miguel Flor, y Rubén (a quien le cuento mis penas rápidamente, jejeje). Tras un buen rato caminando, llego a la media maratón, bien!! Llevo 3h30’ de carrera, así que tengo 4h30’ para volver… creo que sí que podré!! La bajada la hago trotando, parece que comer algo arriba me ha sentado bien. Toda la vuelta la hago corriendo por donde puedo, y caminando donde no (como todos, jejeje). Al llegar al animador de la bocina, empieza a chispear. Las piedras grandes se mojan y resbalan, así que hay que ir con cuidadín… Bueno, mientras solo sea gotitas… Conforme pasan los kilómetros empieza a llover más, lo que me impide correr todo lo que quisiera bajando… jo, eso que se me da bien!!! Llego a la playita donde me quería bañar, y aunque llevo menos de 6 horas no me hace falta bañarme, jejej. Empiezo la subida a la Muela por esos zigzags, y estando ya empapada empieza a hacer viento… mucho viento y mucho frío!! Y yo en manga corta, sin cortavientos, ni chubasquero… ni gorra!! Me chorrean las gotas por la cara, me escuecen los ojos (debe ser de la crema que me había puesto para el sol… ilusa de mí!!)… nada, que para eso hemos venido, para sufrir!! Después de mucho sufrimiento, frío y agua llego a la Muela, donde me dicen: todo p’abajo!! Yo ya lo sabía, por eso estaba tan contenta!! Llevaba las zapatillas empapadas (choff, choff), y es esa zona habían muchos pinchos que no me molestaba ni en apartarlos, solo quería terminar!! Mira que somos masocas… jajaja. Todo ese tramo de bajada, rectas, alguna minisubida, lo pude hacer corriendo, la meta estaba ahí ya!! Así, después de 7h32’ llegué a meta… Menuda aventura!! Ana y Rubén salieron a recibirme (estaban comiendo algo calentito en el bar); Ana había esperado todo este tiempo por allí y la pobre estaba congeladita… eso también tiene mérito!! Rubén había hecho muy buen tiempo, y también había pasado mucho frío… así que a comer algo de lo que había por ahí (que era muy poco), una duchita rápida (con agua fría, pero que con el frío que hacía era agradable), y de vuelta a Alcoy, charlando y comentando la carrerita…

Conclusiones: Probar la riñonera/mochila antes de una carrera tan larga (esto ya lo sabía); que en la página del instituto nacional de meteorología digan que hay un 10% de probabilidades de lluvia significa que va a llover fijo, y en ese caso, la crema solar no hace falta!!



Crónica de Rubén

04:30 AM y suena el despertador después de haberse acostado a la 01:30 AM por la necesidad de acudir a un compromiso ineludible … bufff, que sueño. Recogemos a Jessi y nos vamos hacia Cartagena, concretamente a Galifa. Menos mal que llevamos el gps, porque a pesar de hacernos pasar por dentro de la ciudad y que todos los semáforos parece que estén siempre en rojo, sin su ayuda no lo hubiéramos encontrado ni de casualidad.

Llegamos al polideportivo, y esta vez, quizá por la distancia de nuestra zona habitual, los conocidos son pocos, Miguel Flor, Alberto, Vicente Roig, Joserra, Pez, Alfredo y poco más …

Recogemos los dorsales y Jessi y yo vamos a ponernos el traje de faena, ya que Ana nos acompaña, pero ha decidido (muy sabiamente) no correr, ya que se hizo un esguince 15 días antes en Jumilla y todavía no se siente recuperada.

Nos reunimos con todos los participantes en la salida y a pesar de que hace un poco de fresco, ya empieza a salir el sol y se está bastante bien. Entre bromas con Miguel Flor acabamos en la 1ª línea de salida junto a Aurelio Olivar, Salvador Calvo, Vicente Roig, Juanan Ruiz, lo que hace una estampa muy curiosa (ver fotos).

Salgo junto a Miguel Flor y vamos 200 mts entre los 10 primeros, da gusto ver correr a los máquinas, parece que vayan cuesta abajo y eso que hemos empezado para arriba … Los primeros kms son un poco rompepiernas pero globalmente en ascenso, nos alcanza Alberto y vamos los 3 juntos hasta que llegando al alto de la Muela, Miguel sale como una bala y se lanza cuesta abajo y se nos pierde … Nosotros seguimos tranquilamente, pasamos el primer avituallamiento (son solo de agua), una pequeña subidita y la bajada estrella de la carrera (que a la vuelta será subida). Aparte del desnivel, el terreno es muy malo y técnico, mucha piedra grande y suelta, y encima por esta zona abunda un arbusto tipo espino que te va dejando las piernas con unas buenas marcas de “guerra”.

Una vez abajo estamos en una preciosa calita donde dan ganas de quedarse, pero hemos venido a sufrir un rato y hay que seguir. Aquí me encuentro a Vicente Roig, que había elegido esta carrera para probar el ir sin vendarse los tobillos, pero parece ser que no ha sido una decisión acertada, sigue un rato con nosotros y luego sale disparado y no lo volvemos a ver hasta la vuelta. Por aquí el recorrido es un poco más agradable, subimos y bajamos constantemente, pero las sendas son más asequibles y hay tramos de pista, un pequeño tramo de bloques de piedra, luego vamos por el cauce de un río y después más pista antes de llegar a la última ascensión que coincide con la media maratón. En este tramo nos encontramos a Aurelio Olivar de vuelta, lo que nos alienta ya que quiere decir que nos queda algo así como una hora para darnos la vuelta.

Durante el recorrido hay muchos tramos en zigzag y vemos a Miguel a lo lejos mientras nos increpa para que nos demos prisa … esta fuerte hoy el tío y nos ha sacado una buena distancia.

Después de saludar a todos los que van volviendo, llego arriba en algo menos de 3 horas, lleno el bidón y para abajo. Me encuentro a Jessi que va en muy buena posición pero me dice que tiene problemas de “presión intestinal” y va andando por ver si se le pasa. Aquí el cansancio se nota y Alberto y yo vamos con un ritmo algo inferior al de antes, pero vamos muy bien de tiempo y no hay que obsesionarse.

Pasado el cauce del río el cielo se ha nublado considerablemente y empiezan a caer gotas, pero con muy poca intensidad y nos decimos que sería estupendo que siguiera así, ya que la temperatura es ideal para correr … ilusos ….

Cuando llegamos a la zona de bloques nos encontramos a Miguel sentado en una piedra, está “pajarico” total como dice él, se quedará un rato a ver si recupera y nosotros seguimos, hasta que unos metros más adelante Alberto me dice que también nota que le está dando bajón, así que a partir de aquí continúo yo solo y es entonces cuando se desata la tormenta …

Al llegar a la cala de antes de la subida a la Muela ya llueve considerablemente y me he caído dos veces por las rocas mojadas, lo que ha dejado mis manos y rodillas ensangrentadas, así que en el avituallamiento paro un momento a “lamerme las heridas” y emprendo la subida bastante bien físicamente a pesar del agua, el viento y el frío que hace. Adelanto a varios corredores que no van muy bien y pasito a pasito intentando que no me derribara la tormenta llego arriba y emprendo la última bajada por rocas antes de llegar a las sendas del principio. Pierdo bastante tiempo en este tramo, ya que soy bastante malo bajando y si encima está mojado … pero bueno, tampoco hace falta matarse.

Finalmente entro en meta en 6 horas 24 min, me ducho, como algo y vamos a recibir a Jessi, que ha llegado en 7 horas 32 min, está hecha una fiera. Luego nos enteramos que de 150 inscritos solo entraron 66 en meta, por lo que todavía quedamos más contentos.

A la organización quizá quedó deslucida por el viento y la lluvia, pero es posible que si hubieran puesto alguna cosita más en los avituallamientos, todos lo hubiéramos agradecido, a pesar de que estábamos avisados, que quede claro.

CLASIFICACIONES

Fotos

Sureste Trail Marathon 2009