viernes, 21 de noviembre de 2014

LICENCIA FEDME 2015

Como todos los años, podéis tramitar la licencia con el APER. Los precios para el año 2015 son los siguientes:




Si estás interesad@, realiza el ingreso en la siguiente cuenta del Banco Sabadell:

ES42 0081 0267 8700 0671 3280
A continuación, envía un correo electrónico a aperequip@gmail.com con estos datos, junto con el justificante de ingreso:

NOMBRE Y APELLIDOS
D.N.I.
FECHA DE NACIMIENTO
DIRECCIÓN (indicando código postal)
E-mail
TELÉFONO


Día máximo de ingreso, el 15-12-14, cuando se realizará el pago y solicitud a la Federación de todas las licencias. Si se tramitan otras posteriormente, se cobrarán 5€ más por gastos de gestión y envío.


viernes, 2 de mayo de 2014

II TRAIL SOLIDARI CIUTAT D'ALCOI (26/04/14)

Crónica de Jorge 

Ya pasó la gran cita del 2014 en mi calendario. El año pasado, a pesar de ser una primera edición, la carrera obtuvo un gran éxito y prueba de ello es que este año las inscripciones han volado. Nosotros entramos por los pelos el último día.

Este año, el equipo Arrapapeus, estaba formado por Óscar Cortés, Enrique Vizcaíno, Jordi Calatayud y yo.

El primer detalle que había que tener claro era el “equipaje”. Empezamos a recordar carreras hasta encontrar una en la que hubiéramos corrido los cuatro y esa fue la Pujada a la Font Roja, “¿Estamos de acuerdo?, sí, ¿la que lleva la propaganda de Masía la Mota?, sí esa”, todos de acuerdo……… hasta que nos encontramos el día de la carrera……… tres de amarillo y uno de verde, “¿qué ha ocurrido?”, no caímos en el detalle de que habían patrocinado la carrera más de un año.


Tardamos en pasar el control de firmas porque Óscar y Jordi fueron a dejar unas cosas en el guardarropa y había mucha cola. Por fin nos juntamos con todos en la Plaça de Dins. Antes de ir a la zona de salida, nos colocamos las narices rojas para hacernos la foto, ya que este año el dinero recaudado contra el cáncer estaba dedicado a los niños.
Con unos minutos de retraso tomamos la salida y apretamos un poquito el ritmo respecto al año pasado para evitar el tapón que se formó después del Parque del Romeral en 2013. Enrique protesta porque le cuesta empezar tan rápido y luego resultó que el tapón no fue para tanto porque habían dos caminos para elegir y la cosa iba bastante rápida.

Con tanta gente cuesta ir todos juntos y Óscar y Jordi se nos van delante hasta el avituallamiento de la entrada del Barranc del Cint donde nos reagrupamos. 

Aquí viene una parte dura de la carrera con toda la entrada del barranco, el paso por el Mas del Garrofer y la subida hasta el Pic de les Pedreres. Después las vistas maravillosas desde arriba y empezamos a bajar hasta llegar a la vía verde y seguir hasta la Font del Quinzet y coger el camino que llega al Mas de la Mota.

Música, un buen avituallamiento y un gran recibimiento por parte de la dueña, Indira, que va haciendo fotos a todos los equipos que pasamos y se alegra mucho de ver nuestras camisetas.

Cogemos otra vez la vía verde hasta el Pont de les Set Llunes, donde nos hacen bajar a la pista que va directamente al Racó de Sant Bonaventura en lugar de seguir hasta coger la senda del año pasado. Por lo visto algún corredor se ha equivocado y la organización decide que vayamos todos por la pista. Mejor, 500 metros de subida dura que nos evitamos.


Llegamos a la parte más dura de la carrera, 10 kilómetros casi siempre de subida. Primero la costera del Racó, para llegar a la carretera de Les Llacunes, donde tenemos otro avituallamiento en la Casa Rural de Bons Aires. Aquí decido coger los bastones para seguir por el GR-7, pero no consigo abrilos, están atascados, menos mal que Enrique me cede los suyos.




Salimos a la carretera de la Font Roja, que dejamos al llegar a la Font del Rossinyol para coger la ruta del Barranc de l’Infern hasta subir al Pla dels Gal.lers, que aunque es preciosa, se me hace un poco larga en esta ocasión.

Ya estamos sobre el km. 30 y nos tomamos un merecido descanso en el avituallamiento. Ahora nos esperan un tramo por pista hasta subir al Menejador, el punto más alto de la carrera (1.334 m.).

Después, la parte que más pesada se me hace de este recorrido. Primero la senda para llegar a la cava Simarro, donde me resulta imposible correr porque son todo piedras, para coger un poco de camino, donde sí que trotamos un poco, para llegar a la senda dels Nevaters, que en circunstancias normales disfruto bastante, pero a esas alturas de carrera resulta interminable y peligrosa para los corredores torpes como yo.

Después de más de 9 kilómetros, básicamente de bajada, desde el Menejador, llegamos a Sant Antoni, donde me dan un ZAS en toda la boca. Al llegar al avituallamiento se me ocurre decir en voz alta “una cerveza” y de repente me veo que uno de los voluntarios me alarga el brazo con una cerveza bien fría…….. y como yo he leído que lo mejor para recuperar es la cerveza y además está tan fresquita…….. no me la bebí entera, pero me vino bien.
Salimos del avituallamiento y pasamos por la Ermita de Sant Antoni donde aprovecho para llamar a la familia y decirles que más o menos en una hora llegaremos a meta y lo clavo.

Dejamos el asfalto para coger una senda muy vertical y deslizante hasta salir al polideportivo Francisco Laporta que este año no se me hace tan dura, cruzamos la vía verde y cogemos otra senda para salir al otro lado de uno de los túneles (con lo fácil que sería atravesar el túnel, pero ya no sería tan divertido), otros metros de vía y otra senda para bajar hasta la Venta Saltera, cruzamos la carretera y llegamos al Manantial del Molinar que este año no rebosa agua y no está tan bonito como el año pasado.

Nos dirigimos ya a entrar de nuevo en la ciudad. Parece que este año hay una variante y nos harán subir hasta el Parque de Cantagallet en lugar de seguir recto hasta la calle Sant Vicent, pero nos vamos acercando y no veo que nos desvíen, empiezo a pensar que no es verdad y cuando estábamos a punto de salir a la carretera del Molinar nos hacen coger un camino de subida que, en efecto llega hasta la parte más alta del parque. No es dura pero, después de 45 kilómetros, cualquier subida se atraganta.

Hacemos “cumbre” y ahora sí, ahora todo hacia abajo hasta meta. Calle Sant Vicent, Sant Mateu, atravesamos el Parque de la Glorieta, plaza Ramón y Cajal, calle Sant Francesc y nueva sorpresa, en lugar de bajar toda la calle y entrar a meta, nos hacen callejear unos metros y entrar a meta en “dirección contraria” en la calle Sant Llorenç.

Qué decir de la entrada a meta…… gente a ambos lados aplaudiendo, música, alfombra roja y la cinta para entrar como unos campeones. Óscar me pregunta que tiempo hemos hecho y me doy cuenta de que no había parado el crono. Ocho horas y veintidós minutos, cuarenta y cinco minutos menos que el año pasado.


Avituallamiento en meta, masaje y cervecita con la familia en la Plaça de Dins. En esos momentos pienso que es mucho esfuerzo, que el año que viene no la hago e incluso que quiero borrarme de la carrera del 1 de junio en Banyeres de 27 kms., pero después pasan los días, se te olvida el cansancio y quedan los buenos recuerdos, los saludos a los amigos, la solidaridad de tu equipo.

Este año, como avituallamiento particular, me llevé un par de mini bocadillos, aunque luego sólo comí uno, unas sales y una barrita de chocolate y limón de 226ers. Para beber, en lugar de isotónico, que al final me deja la boca pastosa, me llevé agua y aprovechaba los avituallamientos para beber algo de isotónico.

Por último, felicitar a la organización y a los voluntarios porque se han superado, que ya era difícil y a mis compañeros de equipo, a Óscar y Jordi por sacrificar sus posibilidades de un mejor crono y a Enrique por su paciencia con la brasa que le doy en cada avituallamiento.

miércoles, 9 de abril de 2014

MiMaMuCa (06/04/2014)

Crónica de Jorge

En ocasiones, tenemos tantas ganas de que llegue un acontecimiento que, cuando llega, nos sentimos un pelín decepcionados porque las cosas no salen como habíamos imaginado. Supongo que por eso, a la mayoría de personas nos gustan más los libros que las películas que hacen de ellos y eso es lo que me ha pasado este año con Carrícola.

Hacía seis meses de mi última carrera, el maratón alpino de Al-mudaina, y lo pasé tan mal ese día que me propuse prepararme mejor para las siguientes carreras. Desde que empezó 2014 he seguido al pie de la letra mi plan, entre 10 y 15 kms. entre semana y pasar de 20 los fines de semana, intentando caminar lo imprescindible en las subidas.

Mi primer objetivo para este año en Carrícola era mejorar mi marca del año anterior de 2:34 y si era bajando de 2:30 pues mejor. Conocía el recorrido y sabía lo que me esperaba, pero no ha podido ser. No solo no he bajado, sino que he hecho 3 minutos más que el año pasado.

Pero vayamos por orden. Salimos de Alcoy sobre las 8:20 h. en dos coches y al llegar a la rotonda del Decathlon…….¡¡¡ la Guardia Civil !!!, pensé que sería el típico control de alcoholemia, pero observamos como el agente se pone a meterle la bronca a Jessi, que si no sabía qué significaba tal gesto, que si algo sobre una línea imaginaria…. y nosotros alucinando en el coche de atrás. Nos toca el turno, se acerca un primer agente y nos pregunta si habíamos bebido algo, le explico que acabamos de levantarnos y que nos vamos a correr y se marcha, pero veo que se nos acerca el otro que había hablado con Jessi y nos cae la bronca también a nosotros, que si cuando nos hagan ese gesto de parar hay que poner las luces de emergencia, y no sé qué más cosas. Bueno, finalmente, seguimos nuestro camino.

Al llegar a Carrícola, el mismo espectáculo de siempre, un pueblo rebosante de gente yendo de un lado para otro, coches intentando buscar un hueco para aparcar (fuera del pueblo claro), la gente del pueblo en sus puestos para que no nos falte de nada……. una gozada, un gran ejemplo de cómo hacer bien las cosas si se tiene ilusión en cada detalle.
Parecía que no hubiéramos salido de casa, había alcoyanos por todas partes y los que no eran de Alcoy también van resultándome familiares después de cuatro años y por lo visto algunos también se acuerdan de mí. Se me acercó un chaval a saludarme porque se acordaba de haberme visto en la subida al Montcabrer y de eso hace dos años, pero lo que más me preocupó fue que alguien se acordara de mí………. en las duchas.

Yo intenté calentar antes de la carrera, pero era difícil, siempre había alguien a quien saludar, aunque al ritmo que yo corro no importa mucho, digamos que los primeros 5 kms. de la carrera son mi calentamiento.






A la hora de la salida, las 9:30 h., ya hacía mucha calor. Música, globos, aplausos y empezamos a correr. Salimos hacia abajo, con algún pequeño cambio en esa parte y volvemos a pasar por el pueblo en el km. 2, lo dejamos atrás y empezamos una subida hasta el km. 4, donde hacemos una bajada por senda de 1 km. para empezar a subir al castillo. Una subida corta pero dura, sobre todo el tramo final donde me toca caminar algún trozo.
Seguimos subiendo hasta el km. 8,5 donde viene mi parte favorita de la carrera, una bajada corta, apenas un kilómetro por senda, pero que ya entrado en calor y sin estar todavía cansado se disfruta bastante.

Después, 2,5 kms. de subida hasta llegar al punto más alto de la carrera y a partir de aquí, “casi” todo es hacía abajo. Este punto marca la frontera para saber si voy bien o voy a sufrir. Y este año ha vuelto a tocar sufrir. Son bajadas por senda, que sin ser “técnicas” como dirían los entendidos, son peligrosas para los torpes como yo, porque son muy corredoras pero a la vez llenas de piedra y raíces, por lo que es muy fácil, sobre todo si vas cansado, tropezarte y caerte.
Como mis sensaciones, en esos momentos, ya no eran buenas, intenté concentrarme en la pisada para no caerme, y al menos eso sí que lo conseguí, aunque tuve algún tropezón y torceduras sin importancia.
En ocasiones tenía la sensación de estar viviendo el día de la marmota, no paraban de adelantarme los mismos corredores una y otra vez.
Al terminar esa bajada sales a pista, uno de los tramos desagradables de la carrera para mí. Son dos kilómetros que parecen no terminar nunca, para empalmar con otra bajada muy parecida a la anterior, senda muy rápida, las fuerzas ya van muy justas y tengo el mismo objetivo, no caerme.

Otra vez salimos a pista para completar apenas un kilómetro, que se hace eterno a esas alturas de carrera para, por fin, coger la última senda que baja hasta el pueblo. Otra vez la música, los aplausos y el enésimo detalle que hace de Carrícola mi carrera favorita, este año nos ponen la cinta a todos para que podamos sentirnos campeones por una vez, aunque todos los que afrontan un reto como una media maratón de montaña ya lo sean sólo por intentarlo.
¿Qué análisis puedo hacer? ¿Quizás fue por el calor? ¿Quizás confié demasiado en mi “supuesta” mejor preparación y apreté demasiado en la primera parte de la carrera donde están las subidas? ¿No lo hice bien en los avituallamientos? Como suelo acabar tocado del estómago en las carreras a partir de media maratón, procuré hacerlos suaves. Cuando llegaba, me tiraba un vaso de agua por la cabeza, me bebía otro, me tiraba un segundo vaso por la cabeza y cogía algún trozo de naranja, además de una pequeña bebida de cafeína a mitad de carrera.

En fin, hay que intentar ser positivos, así que, interpretando los datos a mi conveniencia, como hacen los políticos:
- Puedo decir que en las cuatro ediciones he sido muy regular en mis tiempos, con una diferencia de menos de cuatro minutos, entre mi mejor crono y el peor.
- Como estoy acostumbrado a mirar la clasificación de mi equipo de fútbol empezando por abajo porque termino antes, hago lo mismo con las carreras y en mis cuatro participaciones en Carrícola, cada año he dejado atrás más gente que el año anterior, duplicando este año, donde siendo la edición más numerosa, he conseguido entrar por delante de 144 corredores (el que no se consuela es porque no quiere).

El año que viene volveré a intentarlo, eso seguro.

lunes, 10 de febrero de 2014

CARRERA CLANDESTINA

TE ANIMAS???

Recibir un e-mail de este tipo, no tiene precio. Decir que no, es imposible!!!

RECORDAD (los que ya estáis en el ajo) y SABED (los que recibís noticia por primera vez) que el 23 de febrero tenéis una cita con la aventura y la emoción. 

Una carrera auténtica. De las que ya no hay. Si alguna vez alguien se preguntó ... ¿cómo y por dónde corrían el hombre y la mujer primitivos? La respuesta la obtendrá el 23 de feb.

El plan, excepto en caso variación que será comunicada, consiste en concentrarnos con sumo sigilo a las 9 am en la Rotonda de la Ronda Norte más próxima al Puente del Bimilenario de Elche. Ahí hay un gran descampado. Desde ahí nos desplazaremos al lugar de celebración del evento.

Para participar en el evento se requiere ser cómplice del mismo. Por ello no sois (los que vengáis) participantes. Sois cómplices, con todo lo que ello implica.

Mr. X os comunicará quién es vuestra pareja (resultado de sorteo sin trampa ni cartón) y la hora de inicio. Se os facilitará un plano. Existirá alguna señalización. La imprescindible. Pues no hace falta marca alguna cuando no hay más que una opción lógica (vuestro instinto y experiencia os guiarán).

Cada minuto (o cada medio minuto si la complicidad resultara ser muy numerosa) tomará la salida una pareja. El recorrido no será superior a 20 k. Puede haber un avituallamiento (además del que seguro habrá en meta). 

Es preciso llevar cuidado. 

La bebida, la comida y los regalos y premios, se pagarán a escote entre los asistentes. Si hubiera o hubiese cantidad sobrante (se hará lo preciso para que exista sobrante), se entregará a la Asociación sin ánimo de lucro que colabore con la realización de esta aventura. Y si no colabora ninguna, se entregará a la Asociación que elija la pareja ganadora.

La cuota por persona no será superior a 10 Euros.

Imprescindible llevar móvil, zapatillas de montaña y bidón de no menos de 1/2 L. 

Muy recomendable llevar mallas largas o calzas altas.

Habrá betadine.

Seguiremos informando ....